¿Cuál es el importe mínimo para entrar en una lista de morosos?

Estar dentro de una lista de morosos puede ser un problema si estamos buscando financiación. Muchas veces un ciudadano se entera que está dentro de alguno de estos ficheros de morosos cuando una entidad financiera le rechaza el crédito que quiere solicitar o no consigue la hipoteca que desea para comprarse una vivienda.

Entrar en una lista de morosos es muy fácil, solo basta con tener una deuda de 50 euros para que el acreedor, la empresa exija el pago de la misma.  En el pasado no existía un importe mínimo por el cual podían incluir nuestros datos en un fichero de morosidad, pero con la nueva entrada en vigor el 5 de diciembre de 2018 de la Ley Orgánica de Protección de Datos y Garantía de Derechos Digitales esto cambia. La nueva LOPD establece que no se podrán incluir en los ficheros de morosidad deudas en que la cuantía del principal sea inferior a 50 euros en el caso de particulares e inferior a 300 euros en el caso de empresas.

Uno de los casos más comunes dentro de estos ficheros era el impago de una factura de telefonía, luz o agua por algún tipo de desacuerdo en las condiciones con estas empresas. Mientras se solucionaba el desacuerdo, si el cliente no pagaba la factura que le reclamaba la compañía era incluido directamente en los ficheros de morosidad. La deuda puede ser muy pequeña, por ejemplo de 60 euros, pero las repercusiones son muy grandes para el ciudadano.

¿Qué pasa si estoy en una lista de morosos?

Las repercusiones directas de estar dentro de una lista de morosos pasan por que las entidades financieras nos puedan denegar un préstamo, una hipoteca e incluso el alta en una nueva compañía de teléfono, de gas o de luz.

La función de los ficheros de morosidad es facilitar la valoración de la solvencia de una persona o entidad a la hora de solicitar algún tipo de financiación importante. Esta nueva ley es mucho más coherente ya que elimina la posibilidad de que nos sea denegada una financiación por un desacuerdo en una factura de teléfono, luz o agua siempre inferior a 50 euros y sin poder sumar intereses o costes.

¿Quién puede incluirme en una lista de morosos?

La nueva LOPD dice que el acreedor o quien actúe por su cuenta o interés siempre que antes de anotarnos en la lista de morosos cumpla todos los requisitos materiales. Estos son:

• Exactitud del dato
• Requerimiento previo

Y como información adicional, el importe mínimo para entrar en la lista de morosos debe ser de 50 euros.

¿Quién puede consultar mis datos en la lista de morosos?

Los datos anotados en la lista de morosos solo pueden ser consultados por entidades que realicen contratos de crédito al consumo o entidades que mantengan un contrato con la persona anotada que implique financiación, pago aplazado o facturación periódica. De esta forma podrá anotarnos en la lista de morosos cualquier entidad bancaria, entidad de créditos o microcréditos, compañía telefónica, compañía de suministros, en definitiva, cualquier entidad con la que tengamos un contrato que implique pagos.

¿Cuándo pueden incluirme en la lista de morosos?

Para que tus datos puedan ser incluidos en una lista de morosidad tiene que existir una deuda que cumpla las siguientes características:

• Cierta
• Vencida
• Exigible

Dicha deuda ha tenido que ser reclamada con anterioridad por la entidad, y darle al cliente un plazo de 30 días para poder abonar la cantidad. Si tras pasar ese plazo el cliente no ha abonado la cantidad reclamada, la entidad procederá a registrar los datos de dicho cliente en los ficheros de morosidad.

La antigua ley obligaba a la entidad avisar en el momento en que se realizaba el contrato de que podía anotarse en una lista de morosos si se producía un impago y en el momento en que se iba a incluir la deuda en la lista de morosos de que se iba a hacer. Esto cambia con la nueva ley y solo tiene la obligación de comunicárnoslo en el momento en que formalizamos el contrato.

Tener una deuda de un importe mínimo de 50 euros no es una cosa complicada y como hemos comentado, es relativamente sencillo que nos incluyan en una de estas listas de morosos. Esto puede hacer que nuestros planes de cambiar de coche, comprar una nueva casa o pedir un crédito para una reforma o un imprevisto nos pueda ser denegado. Con la cantidad de empresas con las que mantenemos contratos hoy en día, es muy importante comprobar siempre que nuestro nombre no aparece en ninguna de estas listas de morosos.

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